¿Qué celebramos en navidad?

Por: Andrés Carrera

Resulta sorprendente para mí como los creyentes hemos equivocado la verdadera razón por la que Cristo vino al mundo. Debido a eso hemos rebajado nuestra experiencia cristiana a una donde el pecado es una realidad latente en nuestras vidas. Es decir, nuestra forma de vivir el cristianismo es peco – pido perdón – peco – pido perdón, y así hasta que me muera.

Hemos reducido la navidad a una experiencia de perdón, cuando es una de liberación.

Cuando el ángel se le aparece a José, para decirle quien es el que nacerá, Mateo nos relata en el capítulo 1 verso 21 que le dice Él LIBERARÁ a su pueblo de sus pecados, no que Él vendría solo a PERDONARNOS los pecados. Y no es que perdonarnos los pecados sea poca cosa, es que todavía la noticia es mejor que eso.

El mensaje del ángel a José y el mensaje del cristianismo es mucho más grande y si reduces la Navidad al simple hecho del perdón, has perdido el mensaje principal de la misma. Porque Jesús hizo más que solo conseguir que se perdonaran nuestros pecados, más que liberarnos de las consecuencias del pecado, que es la vida eterna sin Cristo. Jesús vino a liberarnos del poder del pecado. Jesús vino a sacarnos, absolvernos, librarnos, de la esclavitud del pecado. Hemos sido prometidos que en Cristo somos liberados del pecado en nuestra vida.

Y Cristo habló de esto a lo largo de su ministerio. Se lo dijo a una mujer sorprendida en adulterio a la que iban a apedrear. Cuando sus acusadores se van y Jesús se queda solo con ella le dice una cosa sorprendente que se nos escapa completamente: “anda y no peques más” (Jn.8:11). A lo que deberíamos preguntarnos: ¿es eso posible? ¿podemos vivir nuestra vida sin pecado? ¿podemos no pecar nunca más? ¿podemos abandonar el país del pecado? ¿la esclavitud del pecado? ¿podemos decirle que no?

Otro ejemplo para que no quede duda del mensaje: Jesús le está hablando a los fariseos y les hace un contraste entre lo que Él hace y lo que hace un ladrón en JN. 10:10, y les dice que Él “vino a darnos vida y vida en abundancia”. ¿Le suena esto, amigo lector, a nuestro juego de pecar y pedir perdón? Porque si solo nos perdona los pecados lo que ha logrado es que volvamos a cero. Es más que eso, ahora tenemos libertad del pecado y eso es lo que celebramos en Navidad. Porque ha venido a librarle de algo, no simplemente perdonarte de algo.

Años después un fariseo convertido en cristiano, un hombre brillante llamado Pablo, le pone lenguaje teológico a lo que significó la venida de Jesús y en el capítulo 6 versos 12 al 14 les explica varias cosas vitales para entender nuestra libertad.

  • Les dice que no dejen que el pecado les domine, que sea su rey, que no se permitan estar bajo la autoridad del pecado. Cuando leemos eso deberíamos preguntar: ¿Pablo tenemos como elegir? Y la respuesta de él sería: Claro que escoges, porque Jesús nos liberó del poder no solo nos perdonó.
  • Nos deja ver que podemos negarnos a ofrecer los miembros de nuestros cuerpos al pecado, sino ofrecérselos a Dios y que el pecado no tiene dominio sobre nosotros. De manera, que podemos escoger, y si eso es así, entonces he sido liberado y si peco es porque escojo hacerlo, no porque estoy a su merced. Ya el pecado no es mi amo, porque Jesús me libero y eso es lo que celebramos esta Navidad. Nos debería hacer cantar de alegría, caer de rodillas y alabar, pero no, como hemos reducido el mensaje al perdón, no tenemos tanto que agradecer, puesto que ahora estoy en una lucha donde pierdo batallas constantemente y aunque pido perdón, voy a volver a perder inevitablemente. Grábese este mensaje: EL PECADO NO ES SU AMO.

Al final de este increíble pasaje Pablo en el verso 23, nos dice que el pecado es muerte. Esto es algo que todos entendemos aunque el término sea teológico: el pecado mata, el pecado siempre mata algo. Algunos de ustedes tuvieron un matrimonio matado por el pecado, otros sus finanzas destrozadas por la falta de auto control o sea pecado, otros han visto la relación entre ustedes y su hijo o hija asesinada por el pecado de ellos o el suyo. Otros han visto una adicción destruir su vida, y su sentido de valor personal. Donde quiera que hay pecado, algo muere.

Pero no tiene que ser así, porque el regalo de Dios es que viva esta clase de vida aquí y ahora y por la eternidad. El regalo es una vida libre del poder del pecado, una vida que nos libra del control que el pecado tenía sobre nosotros

Ese es el regalo de la navidad, no solamente es PERDÓN POR, sino que es LIBERTAD DE. Libres del pecado. Esa es la buena nueva de la Navidad, a través de Cristo usted puedes tener un nuevo amo, le es entregado un nuevo amo y no es la ley de Dios, es el Espíritu de Dios viviendo en usted y en mí.

Si usted es esa persona cuya experiencia religiosa se limita a fallar, pedir perdón, fallar, pedir perdón, es hora de que alguien le diga que EL PECADO NO ES SU AMO. La lujuria no es su amo, la falta de dominio propio no es su amo, el alcohol no es su amo, su ira o las drogas tampoco lo son.

Cuando llegó a los pies de Cristo, usted le dijo a Jesús que viviera la vida en lugar suyo, y ese hecho lo libera del pecado, pero tal vez hasta el día de hoy no lo ha creído, y el pecado le dice haz esto o aquello y cree que no lo puedes resistir. Usted puede seguir creyendo que es su amo, diría Jesús, pero usted tiene el poder para no pecar nunca más.

Cuando eso entra en su corazón, cuando esa verdad entra en su alma, le podrá decir puedes hablarme, tentarme, mostrarme que estás ahí pero entiende pecado tú ya no eres mi amo.

Si en cambio, usted es una persona que recién está oyendo esto y te parece inconcebible lo que estoy diciendo déjeme decirle: si algún día se cansa, se hastía de vivir así, y claro, no lo llama pecado lo llama de otra forma, como, así soy yo, o no tuve buenos padres, o mi ira, etc.

Si se cansa de la autodestrucción, y la destrucción de sus relaciones, si se hastía de los resultados, déjeme decirle que la Navidad es una invitación a una relación, donde el pecado nunca más será su amo, porque no está bajo la ley sino bajo la gracia y EL PECADO NO TIENE PORQUÉ SER SU AMO,

“Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús porque él SALVARA a su pueblo de sus pecados”(Mt.1:21)

Feliz Navidad a todos ustedes!!


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